Prólogo.

Ver: Fijar la vista con atención en algo.
Observar: Saber observar es más que ver. Observar es el paso inicial de cualquier proceso mental, es la puerta de entrada del mundo externo hacia nosotros mismos.



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sábado, 11 de abril de 2020

NEGOMBO de vuelta - Fin del viaje -


16 de Enero de 2020


Última parada de mi ruta, Negombo, con mi amiga moto. Recién aparcada tras 8h a sus lomos y unos 200 kms. 


2360,1 kms recorridos al rededor de Sri Lanka


Devolviendo la moto en el lugar de alquiler.

Última cena en Sri Lanka. Algo caro, prácticamente el doble, en comparación con lo vivido durante estos 24 días. 

Recuperado mi bañador y pareo olvidado en Jaffna. Como agradezco al hostel de Jaffna su amabilidad en haberme enviado esto. Es más la ilusión de haber recuperado mi bonito bañador. Gracias a todos por ello. Foto con la casa de alquiler de la moto en el momento de recuperar el paquete tras una semana.

Paseo por la playa desde el lugar de alquiler de la moto, con mi paquete recién recibido. Pescadores, y todo el que para a ayudar, en una de sus pescas al estilo de allí. Consiste en echar la red a pocos metros de la costa e ir trayendola a mano arrastrando lo que haya pillado la red en su longitud al hundirse en el agua.



Podría haber sido más fructífera. En la foto faltan ya algunos peces grandes. Para esto estuvieron unas 2 h. Bueno, para salvar el día imagino que bien y gasto cero, salvo el tiempo empleado.


Es cerca de medio día. Momento para irme yendo a preparar y comer algo rápido para ir al aeropuerto. Antes tengo que escribir las postales típicas que suelo enviar a la misma gente como tradición.
Buscando y buscando sitio para comer, se nota que Negombo es mucho más caro. Y ya vengo de vueltas. Quería mi último Rice curry. Al final acabo en un sitio súper local y barato comiendo las sobras que le quedan. Pero a parte de agradecido de que sea así, por compartir con la gente local y salirme de las turistadas, agradecido también por encontrar a 3 españoles, 2 chicas y un chico, comiendo allí también. Me invitan a sentarme con ellos. Fue breve y fugaz, más de lo que me habría gustado, pero me dejó una buenísima sensación. Pau y Álvaro, viajaban en bici. Es gente que aporta y tiene mucho que contar. Algo en mi interior hace click y siento que conecto con esa filosofía. Quizá todavía no a ese nivel, pero si en esa esencia. Pau toma nota de mi móvil para mantener contacto y decirles cosas sobre Sri Lanka, ya que ellos acaban de llegar. Espero mantener contacto.

Más feliz y lleno, cerrando un círculo del viaje, me dirijo a la iglesia católica que hay al lado de ¡l post office. Me meto dentro para sentarme y estar fresquito escribiendo las postales. Una buena utilidad a estos sitios le saco, pienso mientras sigo escribiendo apresurado por las horas y por no regocijarme en la comodidad y frescor que me aporta este lugar de culto al que le estoy dando otro uso, quizá ofensivo para los clientes habituales.

Quedo con Alba y Eduardo en mi hostel. Voy con el tiempo pilladísimo. al estilo Santi. Quedamos allí para que yo pueda terminar de hacerme la mochila. Semana y media después allí están, más morenos e igual de simpáticos. Charlamos por encima, pero yo estoy inquieto y preocupado por hacer todo, no dejarme nada y no llegar tarde al aeropuerto. Pido un UBER que me lleve. Me gustaba la idea de ir en Autobus, pero es un lío y prefiero aprovechar este tiempo en todo lo que he podido hacer hoy y compartirlo con esta gente buena que me he encontrado en el camino.

Antes de mi partida, la almohada que me ha soportado y hecho más liviano mis interminables horaas de moto, se la regalo a la señora de la panadería que hay en frente del hostel. Me cayó muy bien y la vi muy honrada. Se la dejo a su hija, la cual alucinaba y no entendía porque les regalaba una almohada. Pero les va bien, al menos eso me hizo ver.

Con todos los objetivos del día hechos, llega mi coche. Me despido con besos y abrazos y rumbo al aeropuerto.

Adios Sri Lanka.

KALPITIYA



12 de Enero de 2020



Fotos y videos de las 4 inmersiones realizadas en Kalpitiya. Fueron bastante bien.


Raya

Pulpo

Yo :)

Morena blanca

 Yo de nuevo






Yo otra vez





















JAFFNA



10 de Enero 2020

Me levanto en Triconmalee. Una sensación extraña se apodera de mi. Algo como estar en el lugar equivocado. Tengo un buen alojamiento, esto a 2 mins de la playa, pero algo no me gusta. Bueno, está claro lo que es. Lo poco que se puede hacer salvo ver pasar el tiempo y relajarse. Eso suena muy bien, pero el lugar no invita a ello. Eso o lo sientes o no lo sientes. La playa, en esta época del año, no es bonita. Está todo removido y el agua es "sucia" en cuanto a partículas en suspensión. Está todo cerrado, cero ambiente de ningún tipo. Dudo mucho si tomarme el día de estar tranquilo, descansar, recapacitar, hacer aquellas cosas pendientes, escribir... Dudo unos instantes mientras me pego un buen baño de primera mañana en estas aguas. Lo que peor se me da, que el corazón y la cabeza se pongan de acuerdo. Uno dice que me relaje y otro que continúe el camino. Una cosa que me raya un poco es que vine a aquí para al final nada. Pero bueno, eso es parte del camino. Toma de decisiones y equivocaciones por ello.
Finalmente decido ponerme en marcha. Si un lugar no te aporta y tienes la opción de marchar la decisión correcta es continuar el camino. Si no fuese posible, adaptarse rápidamente a ese lugar.
A esta decisión se suma que hoy es festivo nacional. Con lo que se suma al cero ambiente, el que esté todo cerrado. Ni siquiera venden cerveza en todo el día.
Vuelvo al bungalow, comunico que me voy al staff quienes ponen cara de...otro que se va. Recojo todo con cierta calma metódica. Pago y me pongo en marcha. Al final se me ha hecho un poco tarde y me entra un poco de hambre. Decido ir a mi restaurante preferido de la zona y les pido que me hagan algo para llevar. Un chicken fried rice. Con provisiones para el camino, ahora sí me pongo en marcha.
Son muchos kms. Unos 250 kms. Mi culo se asusta de nuevo, pero decido no parar en la primera hora a nada.
La carretera está vacía, se nota que por estos lugares hay menos tránsito y que es un día festivo. Aprieto a la moto quizá un poco demás, pero me siento seguro. Voy a tope vaya. A 90 km/h cargado con las 2 mochilas. Voy con mil ojos, pero se nota que ya la moto y yo somos uno.
El paisaje es bonito. Veo un par de elefantes muy al fondo en su trocito de selva. Paro a mirarlos, pero continuo rápido para que no se me haga muy tarde.
Paro a comer en un apartadito. 2 perros se acercan a mi al olor del rico arroz frito. Les pongo cara de que no, aunque les doy unos snacks que llevo. Los muy desagradecidos no les gusta, quieren mi arroz. Pues va a ser que no. Me siento mal finalmente por no darles nada, pero bueno, continuo con mi decisión de no darles de comer.

Parada a comer apartado de la carretera

Continuo marcha. Esta carretera es chula y divertida. Tomo el desvío a la que parece que ya me lleva a Jaffna en una interminable recta. Paradas a tomar café en lugar muy local se convierte en anécdota. No puedo apretar más el puño de la moto. Adelanto a todo el mundo quedándose alucinados. La carretera no es muy bonita.

Haciendo el tonto antes de cruzar el puente de las marismas.

Por fin llego a la provincia de Jaffna. Una especie de marismas que me recuerdan algo a Cádiz. Un puente chulo me hace parar a hacer fotos a este paisaje extraño. Parece que vas conduciendo por mitad del agua. Continuo avanzando antes de que se me haga de noche... Bueno ya estoy llegando.

Agua a un lado y al otro

Llegada a Jaffna. Se palpa claramente la cercanía con India y su religión Hindú. Me gusta el choque cultural. Parece que estoy en otro país.

Templu Hindú de Jaffna

Llego al hostel. Me asignan la habitación, que está en la planta baja frente a la recepción. un poco oscura y mal ubicada pero creo que por aquí es de lo mejor por este precio. Me doy una ducha merecida y salgo a dar una vuelta con la moto, por si no tenía ya suficiente traya mi culo. Es "gran ciudad", me recuerda a algo vivido en Filipinas. voy hasta la zona de costa, pero ya se ha hecho de noche. Voy a ver donde cenar recurriendo a recomendaciones de blogs. Aparco la moto al lado del templo hindú y veo bullicio de gente. Pillo de lleno una especie de procesión con su Dios a hombros. Sin pensarlo me uno al bullicio para ver y vivir de que va esto. Se meten al templo. Me quedo en la puerta con buenas vistas. Van a hacer una ofrenda o ritual típico, no entiendo de estas cosas. Solo se que estoy viendo algo muy local y chulo. Me quedo viendo esto desde la puerta muy a gusto y feliz de haber pillado este momento. Tan solo una pareja de turistas a parte de mi. Me alegro.

Entrada al templo de "no se muy bien que" 



El sonido de los instrumentos de viento es muy fuerte e hipnotizador









Se palpa en el ambiente y en cosa como esta que han estado en guerra interna hasta hace bien poco. Todo este territorio está muy militarizado con mil controles en la carretera, que por ser turista supongo no me dicen nada, ya l decirles hola sonríen amablemente. Ningún síntoma de inseguridad ni mal rollo, al contrario.

Siguiente día por la mañana. Excursión con la amiga moto por todo el conjunto de islas interconectadas por puentes o barcos de esta provincia. Como decía, va a casi ras del agua. Paisaje monótono pero atrapa.

Una pega es que el agua no invita a darse un buen baño. Pese a ser bonito, le pierde el agua. No transmite limpieza ni atrae nada. Supongo que por eso no es un paraíso, si no todo esto serían Resorts turísticos.

º




Misma percepción sobre sus aguas. Esto  podría ser un punto ideal para darse un buen baño, pero no. Es como agua de ría, que ves que no se mueve mucho y no invita. 

A parte de, tan solo, remojarte los tobillos, claro.

Mini travesía en barco a la isla de Nainativu con mis amigos de travesía.


Isla que tiene un templo Hinduista, al parecer, bastante visitado. Más siendo sábado.

Entrada a la isla recién bajado del barco




Vista de casas derruidas por la guerra. Se ve este escenario a menudo por esta zona. 

Camino para cruzar por puente a Kalapoomy. Llego a un punto donde está el ejercito y me prohiben pasar. Parece que el puente no está operativo, pero me extraña que haya tanta gente ahí y pasen coches en ambos sentidos. En fin, no puedo hacer nada. Todo esto para dirigirme a la playa de Casuarina. Me obliga a dar un vueltón de más de un hora de más. Todo sea por ver esa playa.

La playa es una Mxxxxx. Llena de gente hacinados en un pequeño trozo de agua delimitado por socorristas. Autobuses, tuc tucs, coches. Es como la playa típica de la zona local. El concepto de buenas playas difiere, pero bueno. Me doy un baño obligado a pesar de hacer viento y no tener demasiadas ganas.
Buena foto me deja el camino de vuelta de la playa


La vuelta se convierte en un infierno de moto. De los peores. Muchisimo tráfico, muchísima mierda de polvo y humo, de noche que no se ve nada y así más de un hora de vuelta por carreteras y calles laberintias que me pbligan a parar cada 2 x 3 para ver el camino. Llego al hostel que no me creo ni como he llegado.
Ducha y a cenar. Hoy si me merezco unas buenas cervezas que me tomo en una licorería al estilo New yorkino con bolsa de delincuente. Ceno en el Limahouse o algo así, ya no recuerdo. Apestado de turistas. Se nota que todos leemos lo mismo. Bueno, sin más... otro día más.