SIGIRIYA

7 y 8 de Enero de 2020

Precioso viaje en moto desde las montañas de Ella a Sigiriya. Nada menos que 190 kms en moto. No conforme con eso, escojo la ruta más larga que me introduce por zonas más remotas, como suele gustarme hacer, entre lagos y vegetación más salvaje. Eso si, con la compra de mi inseparable almohada para el culo que le compré al simpático hombre al paso por una mini ciudad.

Sirigiya está destinada al turismo de Sirigiya rock. No es más que una calle con comercios y restaurantes y alojamientos por todos lados en las "calles aledañas". Hay un bar restaurante de reggae a la orilla de un minusculo río que, a pesar de ser un poco caro, te hace pasar momentos agradables escuchando buena música. 

Hay dos opciones de ver la frondosa selva desde arriba, o pagando una pasta (unos 50€) por subir a la Sigiriya rock, o ir a la opción barata de Pirundangala y ver desde allí la Sigiriya rock. No tenía pensado hacer el freaky y subir a ver el amanecer a esta última, pero los otros 3 compañeros de habitación del hostel sí, y la minuscula habitación y el poco tacto que suele tener la gente a las 4 de la mañana me despertaron con pinta de no volverme a dormir, así que pies arriba y a subir rocas a las 4:30 am. Reconozco que estas cosas sientan bien. Te sientes más vivo y aprovechando el tiempo al máximo. Una vez arriba se empezó a nublar repentinamete fastidiando el amanecer, pero por el contrario ofreció momento de intensa luz a través de las nubes haciéndolo especial y dando mucho pie a hacer bonitas fotos.

Resto del día, es decir casi todo el día por delante dadas las tempranas horas, aproveché a visitar la buda cave en Dambulla, y adentrarme por la jungla por caminos de arena remotos a la vuelta, con el maravilloso regalo del templo escondido que Alba y Eduardo me habían chivado el día anterior. 

En resumen, 2 noches (día y medio) agradable con zonas bastante bonitas alejadas del turisteo típico.

Vistas desde la carretera al salir de Ella. Pienso que lo bonito de esta región es perderse por zonas no tursítocas. Muy bonito

Elsalvador de mi cxxx. Poco más de 1€ esa colorida almohada que acabé regalando el último día en Negombo.

Subiendo puertos de montaña

Bajando puertos de montaña. Preciosas vistas que las fotos no hacen justicia.

Arrozales con ese verde que atrapa la vista.

Cruzando lagos infinitos con sus correspondientes ríos. La de bichos que debe haber por ahí adentro.

Monos a mi paso por las poco frecuentadas carreteras. 

Arrozales aun por brotar (o recién recogido, no lo se)

Atento por si veía algún elefante. No hubo suerte.

La famosa Sigiriya Rock al atardecer,

 Homenaje en el reggae bar. Medio pollo para mi

 Pidurangala rock. poco después de los primeros rayos de sol. Sesión de fotos con esa fantástica luz y vistas.

Sin duda, esta es la foto en la que mejor salgo.

Buda Cave en Dambulla

camino alternativo de vuelta a Sigiriya, divertido, local y bonito, que acaba en el fantástico regalo del templo secreto (shhhhh, no contar).

Precioso mini lago de nenufares. Todas esas flores salen del agua. 

Templo secreto

Homenaje 2, esta vez en sitio auténtico de rice curry.

Danger, Cocodrilos en el agua