Amanezco en San Miguel. De lujo dormir solo en esa habitación.
Desayuno lo que ofrecen en el hostel. Cereales con colacao y leche, zumo tang malo y cafe aguadillo con leche y tostadas con mermelada inuntable. Pero para mi perfecto.
Preparo la mochila con los bártulos que creo necesarios para ir en bici, bañarme, hacer snorkel, etc etc. Demasiado pienso. Menos mal que compré esta otra mochila al final.
Hoy, como primer día, no voy a elegir grandes complicaciones. El chico nuevo del hostel me recomienda calas por una zona, mas o menos cerca (20 kms). Para alli decido ir. Todo el camino lo hago por la costa entre carril bici y carretera típica. Me doy cuenta lo poco en forma que estoy.
Paro en una tiendita de las de toda la vida a comprar unos plátanos que me va pidiendo el cuerpo. El señor de lo mas amable me cuela entre todas las señoras y me miran todos sonriendo. Que simpáticos. Dice que las bananas (son platanos) son muy buenos. Son de la isla. Que bien digo, y a 80 cents/kg. En Madrid cuesta 1,8 - 2 €/kg. Aprovecho en la panadería a comprar pan. Y junto al jamón que traigo made in Spain ya tengo comida.
Acabo llegando, después de una bajada larga y empinada que luego voy a tener q subir, a una "calita"/ puerto donde hay una piscina de agua salada con socorristas. Desde lejos era bonita, mas de cerca algo mas turístico. A punto de irme decido quedarme. Me apetece un baño, comer algo y creo que tiene buena pinta para hacer snorkel. No es sitio idilico, pero no quiero complicarme demasiado dejando de vivir el presente.
En el momento en que hato la bici a una barandilla me doy cuenta la parafernalia que tengo que montar para darme un simple baño. Quitarme zapatillas y calcetines, pantalón, culotte y camiseta, gafas, guantes...sacar bañador, chanclas y pareo. Y ver donde realizo la operación y donde guardo semejante fondo de armario. Resuelvo rápido entrando a los vestuarios. La verdad que no está mal montado este sitio. Y todo gratixx. Confío en la gente de aqui dejando el casco sobre la bici y todos mis enseres en la mochila mientras me voy a inspeccionar el fondo marino.
Me sorprende para bien lo que hay. No deja de ser un sitio con afluencia de gente, niños meandose en el agua (y algún mayor que no quiero señalar), etc, etc. Lo primero de lo que me percato es la gran visibilidad que hay. No se calcular metros, pero el agua es cristalina y con las gafas ves absolutamente todo. Hay bastante vida, bancos de peces pequeños, algún grupito grande, una morena, 2 estrellas de mar. Me gusta, para ir abriendo boca está muy bien. Eso sí, se nota la Temperatura del agua. A la que llevas 10 mins entras en frio tiriton.
Me seco 2 mins y decido ir a comer a las mesas de al lado del bar. Compro una cocacola que me cuesta solo 1€. Esto en España...ya serían 2 o 2,5€. Me siento en la mesa y saco mis matahambres (almendras, jamón serrano de Spain, pan y platanos locales). Muy agusto.
Voy a ver si veo otra playa donde estar mas solo y exharme un sueño.
De camino de vuelta, por la empinada subida, he visto desde lo alto un hueco en la montaña a la altura del mar que me ha dado buena impresión. He asomado la nariz y he visto una playa pequeña saliendo del barranco que intuía. Para que buscar mas me he dicho. Tengo las piernas cansadas y aun tengo 20 kms de vuelta. Me noto flojo asique debo ir poco a poco.
No se está mal. Hay niños y familias jugando con las olas y algún chaval escondido en las rocas dandole a los cigarritos de la risa.
Cuando sale el sol le pega mucho. Consigo dormir 5 mins pero el sol me obliga a ir al agua a jugar como los niños con las olas.
Las 17h. Hora de ir pensando en volver. He visto un track de BTT que pasa cerca de donde estoy y vs en direccion Ponta Delgada. Voy a probar a cogerlo.
...no era ninguna maravilla, mas bien caminos de fincas ganaderas con bastante maleza ya que no pasa nadie por allí. Pero por un momento el subidon de sentir caminos de cabras bajo mi culo me emocionó. Reconozco que no soy nada de bici de carretera, al menos con una de montaña. Frikadas a parte...
...he llegado cansadillo al hostel. Ducha rapida, lavado de ropa de hoy rapida y tendido en mi habitacion (por suerte estaré solo estos días y se está de lujo).
Salgo escopetado con un hambre canina. Me he ganado el día y quiero sentarme en una terraza a hidratar el cuerpo con sales minerales lupulo y cebada.
Doy unas vueltas a ver donde ceno. La Taska que me recomendaron ayer está hasta arriba y creo que es mas como ayer, picoteos varios, y con el hambre que tengo hoy podría caer algún pescadito zonal. Sin rayarme demasiado acabo en un restaurante que anuncia fresh fish all days. Me vende la moto con el atún y acabo sentado en una mesa viendo un bucle de teatro futbolero portugues (penalti sin serlo). Traen el plato y hato cabos. Dos rodajas minusculas de atun con lexhuga y tomate y unas papas adornando el resto de plato. 9€ el Atun. Bueno, pagué la tontería guiri, mas que nada por que tengo mucha hambre. Creo que un gran helado va a hacer de recena.
Despues de vagar por las calles, empezando a ser traunseunte sospechoso, voy busca del helado. Un hombre muy amable mi indica un sitio con una alegria extrema. Llego al kiosko de los famosos helados y una cola de unas 15 personas. Aquí llevo 15 mins esperando a que las maquinitas del kioskero sirvan helado para toda esta gente. Son helados de esos de maquina, tipo mc donalds, pero deben ser la leche por la cola y la mayoria locales. A ver si llega mi turno. Le voy a pedir el mas bestia que tenga, eso si lo tengo claro. Mi hambre me ciega y ya que el tamaño de los helados no soon muy hermosos cometo el error y el ansia de pedirme 2. Acabo en el pase maritimo medio escondido de la verguenza rechupeando a velocidades supersonicas ambos heladoa cada uno en una mano mientras me gotea el que no tiene estoy lamiendo en ese momento. Me averguenzo de mi mismo. En fin...
Vuelta al hostel con las manos pringosas de helado.
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